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¿Uruguay se quedará sin agua?

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Montevideo, 09 de julio de 2023.- La nación suramericana de poco más de 3 millones de habitantes vive uno de los momentos más difíciles de su historia debido a una sequía importante y sin registros desde hace 74 años. Pero ¿Uruguay se quedará sin agua? Sí, es posible.

El gobierno del presidente Luís Lacalle Pou decretó el pasado 19 de junio una emergencia hídrica ante la delicada situación. Las pocas lluvias que han caído en los últimos días no se acercan a las necesarias para refrescar los 4 embalses de agua que tiene el país y que surten a ciudades y poblados.

Y aunque en aquel momento el mandatario uruguayo aseguró que “el suministro de agua a través del grifo está garantizado”, también advirtió que se estaba monitoreando la calidad del preciado líquido.

El embalse de Paso Severino está severamente afectado por la sequía en el país gaucho y pudiera dejarlo sin agua

Dos semanas después de aquella advertencia, la situación empeoró y provocó un aumento en los niveles de cloruro y de sodio permitidos para la ingesta humana. Al menos en los departamentos de Montevideo y Canelones los niveles de potabilidad de agua ya están al límite tolerado.

La capital de Uruguay, Montevideo, es una de las más afectadas con la crisis hídrica actual debido a que el embalse de Paso Severino está consumido casi en su totalidad.

Para este mes de julio solo queda apenas 2% del caudal promedio de ese embalse y los especialistas prevén que ya no podrá surtir de agua a la capital del país. Este embalse tiene una capacidad estimada de 67 millones de metros cúbicos de agua y en la actualidad tan solo posee 3.7 millones de metros cúbicos.

Acciones desesperadas

El presidente Luís Lacalle Pou tomó la decisión de exonerar de impuestos a las empresas de agua embotellada para permitir una mejor distribución del líquido. Al mismo tiempo anunció el control de precios del agua potable para evitar la especulación.

Otra acción concreta para afrontar la crisis es la construcción de una planta potabilizadora de agua que se instalará en el Río San José. Esta obra tendrá la intensión de ayudar al sistema de potabilización y distribución del país. El plazo para la construcción de esta planta es de 30 días, por la cual el problema no tiene solución en el corto período.

Por si fuera poco la empresa estatal Obras Públicas Sanitarias del Estado (OSE) no logra concretar acciones que permitan generar confianza en la población. Y sobre el manejo de la crisis hay una fuerte polémica debido a unas declaraciones recientes del primer mandatario de Uruguay donde asegura que “No se va a cortar el suministro del agua, lo que puede pasar es que haya agua de peor calidad que la actual” aclaró.

Por ahora el gobierno uruguayo enfrenta la situación proporcionado hasta dos litros de agua por día para algunos sectores de menores ingresos.

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