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Abusos sexuales en la iglesia será tema clave en agenda del Cónclave
Barret Doyle, codirectora de la ONG Bishop Accountability declaró que «la obligación más sagrada del próximo Papa debe ser proteger a la iglesia del abuso. Su seguridad está en juego, al igual que la autoridad moral de la iglesia»

Vaticano, 29 de abril de 2025. Luego de encubrir por décadas abusos sexuales contra niños por parte de los sacerdotes, la iglesia católica pone en mesa central del Cónclave el tema en medio de los procesos concernientes para la elección del nuevo Papa.
En este sentido, los sucesos de abusos sexuales en la iglesia es una de las temáticas que representó un reto «doloroso» para el pontífice Francisco, que abordó este tema de forma enfática.
Ahora, los cardenales lo ponen entre los principales desafíos del sustituto del primer Papa latinoamericano, el cual se elegirá a puerta cerrada en la Capilla Sixtina el próximo 7 de mayo.
Por su parte, el Vaticano informó a través de un comunicado que «la evangelización, la relación con otras religiones y el tema del abuso» resaltan entre los temas que la iglesia debe priorizar urgentemente.

«Aplaudimos el reconocimiento por parte de los cardenales de que poner fin a la crisis de abuso debe ser una prioridad para el próximo papa», dijo a la AFP Anne Barrett Doyle, codirectora de la ONG estadounidense Bishop Accountability, que documenta la violencia clerical.
También añadió que «la iglesia en todo el mundo, a través de sus parroquias, escuelas, hospitales y orfanatos, cuida de decenas de millones de niños. La obligación más sagrada del próximo Papa debe ser protegerlos del abuso. Su seguridad está en juego, al igual que la autoridad moral de la iglesia».

Antecedentes de lucha por parte del papa
En contexto con lo mencionado anteriormente, Francisco, quien falleció la semana pasada y asumió el poder en el 2013, enfrentó la época en que la iglesia se tambaleaba para responder ante una inminente avalancha de revelaciones y por ende, muchos católicos estaban horrorizados.
El punto de inflexión ante estos sucesos, se presentó en el año 2018 durante un viaje a Chile del pontífice.
Consecuentemente, el Papa Francisco defendió con firmeza a un obispo local contra las acusaciones de haber encubierto los crímenes de un sacerdote anciano, a lo que posteriormente alegó cometer «graves equivocaciones» en el caso, algo que nunca había ocurrido en un papado.
Acto seguido, forzó la renuncia de todos los obispos de Chile. También arremetió contra el cardenal estadounidense Theodore McCarrick, después de declararse culpable por un tribunal del Vaticano por abusar sexualmente de un adolescente en la década de 1970.
Reforma en la iglesia para tratar asuntos de abusos sexuales
En el año 2019, Francisco se movilizó para realizar cambios que permanecieran a lo largo del tiempo en la forma en que la iglesia católica manejaba los asuntos de abusos.
Por lo tanto, eliminó el secreto sobre los abusos sexuales a menores de edad: las denuncias, testimonios y documentos de los juicios internos en la iglesia pueden entregarse ahora a la justicia civil, aunque no hay obligación.
Inclusive, las víctimas pueden acceder a su expediente y a la sentencia.
Por otra parte, a través del texto Vos Estis Lux Mundi (Ustedes son la luz del mundo), el también jesuita argentino, oficializó permanentemente comunicar a la iglesia cualquier sospecha de agresión sexual o de acoso y cualquier intento de ocultación por parte de la jerarquía.
Pero las víctimas continuaron lamentando que el clero no estuviese obligado a denunciar posibles crímenes ante la justicia civil, a menos que le obliguen las leyes del país. El secreto de la confesión siguió siendo absoluto.
Por su parte, la luchadora católica contra el abuso sexual, Barrett Doyle instó a que «lo que necesitamos del próximo Papa es una acción significativa, no más retórica, que revele los nombres de los miles de sacerdotes declarados culpables hasta la fecha según la ley de la Iglesia».
«(…) y que promulgue una ley universal de la Iglesia que retire permanentemente del ministerio a todos los abusadores de menores comprobados», sentenció.
